Algo se muere en el alma

La vida es verdaderamente una mierda, y por muy temprano que te levantes, sigue siendo una mierda. En momentos claves en la vida de una persona, en el cuál sufres por algún motivo, sea por una cosa o por otra, es cuando te das cuenta de que lo que verdaderamente vale en esta vida son las cosas pequeñas y vivir día a día disfrutando al máximo cada uno de ellos, Carpe Diem. Y no con luchas y peleas, porque en definitiva eso no sirve para nada, y ¿por qué no sirve para nada? Pues muy fácil, y en algunas situaciones es cuando te das cuenta de ello, pues no sirve para nada, porque no somos nadie, estamos aquí sólo de paso, algunos más otros menos, pero de paso. Nadie sabe lo que le espera el mañana, o si ese mañana llegará. Ya puedes tener la edad que tengas, estar más sano o más enfermo, y así miles de cosa, que a todos nos llega.
Cuando alguien se va, y si encima no le encuentras explicación, y aún encontrándosela, no hay palabras para reconfortarte.
No quiero tampoco machacar mucho este tema, porque la verdad es que no es este mi propósito. El verdadero propósito de este post, es en cierta manera, el de despedirme, el de decir el como en estos días me siento y una manera de desahogarme es hacerlo aquí en mi blog, tal vez no sea el mejor sitio, lo sé, pero no tengo otro, porque si tuviera una televisión, un programa le hacía, porque se lo merece, por la bellísima persona que era, y no es un cumplido porque ya no está, ¡no! Es que verdaderamente lo era, era un ángel en la tierra.
Aún ahora escribiendo esto, aún no llego a creérmelo, pienso que es un mal sueño, una horrible pesadilla y que cuando despierte seguirá con todos nosotros y con su familia, que es la que mas echará en falta su presencia.
Yo siempre recordaré los buenos momentos que disfrute con su presencia, ya sean en el trabajo, con las bromas o las “peleas” de agua, cuando entro el jefe y te dijo: - “parecéis niños de tres años”, aún tengo esa pistolita de agua, no quiero ni verla. Las veces en que todos salíamos a merendar, y así algunos recuerdos más, que serán los que yo recuerde de ti. Y como yo, espero que todas las personas que te conocieron hagan lo mismo y te recuerden por los miles de momentos bonitos que pasaron contigo.
Y para terminar, yo, como creyente que soy, espero algún día estar donde estás tú hoy, en el mismo cielo.
Este post esta escrito intentando guardar y preservar la memoria de esta persona, e intentado que casi nadie que no me conozca pueda relacionar este post con su persona.

ALGO SE MUERE EN EL ALMA...