"El honor y la palabra de un hombre de bien deben estar por encima del dinero".

"Cuando el sabio señala a la Luna, sólo el tonto se fija en el dedo " - Viejo proverbio chino-

"ZP roba al pobre para dárselo al rico"

Ronda capital del transfuguismo

miércoles, 30 de marzo de 2011

DIOS ESTÁ...

Escuchando este año como en otros anteriores los carnavales de Cádiz, me lleve una sorpresa al escuchar un pasodoble casi insólito. Un pasodoble de Luís Rivero de su comparsa “Los defensores de Luís”. El autor hace una defensa de la dignidad de los creyentes y de nuestra Fe en Dios. Un pasodoble valiente cantado en un concurso de la repercusión que tiene el Carnaval de Cádiz y que contrarresta los ataques que la Religión Católica y los Creyentes sufrimos últimamente en este país y por este incompetente Gobierno. La verdad es que merece la pena escucharlo, las palabras de Luís Rivero hacen una lectura perfecta de lo que significa ser creyente. Y como dije antes valiente e insólito, porque ahora lo que pega, lo fácil y lo que se lleva es totalmente lo contrario, atacar a la Iglesia y a los Creyentes. Ahora el ser creyente es un delito y se persigue. El pasodoble se titula “Cada vez que digo que yo soy creyente”.



Cada vez que digo que yo soy creyente aparece algún valiente que me juzga, con la voz cobarde del intransigente que surje siempre de la censura. Esos que presumen ser inteligentes y van buscando su razón en la incultura porque no entienden que la Fe me haga más fuerte. “Que simplemente es un invento de los curas, que surge nada más, que surge por el miedo hacia la muerte“. Y a quién se ofende si le doy gracias a Dios, y a quién se ofende si le pido protección, qué más me da quién me comprende Si el creer me hace más fuerte y me hace ser mejor persona. Si a Dios lo encuentro solamente en el amor y no en las manos indecentes, que se justifican si le adoran ni en las manos pederastas, ni de aquellos que mataran y juraran en su nombre. Dios está en las manos del que ayuda del que no pregunta nunca y que perdona los errores. Ese es el Dios que me llena ese es el Dios que ilumina y si en el mismo día en que me muera compruebo de verdad que no existiera la misma Fe que muchos tirarían si me hizo ser feliz toda mi vida ya habrá valido la pena, ya habrá valido la pena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

El autor del blog no se hace responsable de los comentarios del mismo.